La importancia de no dejar de ser niños.

Extraño ser niño, no puedo negar que ahora como adolescente se tiene mas libertad en realizar cosas que antes la corta edad impedía, pero  muchas cosas que disfrutaba en esos años ya se repiten con misma intensidad o simplemente no pueden volver a ocurrir...

• Ver pasar el tiempo tan lento, un día podía ser toda una aventura de principio al fin, depertabas con las ganas de querer comerte al mundo con una imaginación que te impulsaba a jugar infinidad de juegos que al caer el sol en el horizonte tu cuerpo necesitaba encontrar la cama, cerraba los ojos esperando con ansías el próximo día sin ninguna preocupación, tus pensamientos antes de dormir no eran de responsabilidades que tenias que cumplir sino cómo divertirte al siguiente amanecer.
•  Juegos que ahora solo resultan simples, sin diversión e inmaduros donde tienes que hacer un esfuerzo físico innecesario, pero era indudable como los disfrutaba, nunca podré olvidar como me reía con lo que hacía al  correr, provocarme caidas, tratar de ser el mejor, conocer otros niños. Jugar hacía que el cansancio tuviera un limite pues nos olvidabamos de eso. Siempre fue una lucha conmigo mismo y  la competencia , finalmente si fracasabsa disfrutabas el perder o si eras el mas débil siempre buscabas superarte.
• La capacidad de asombro siempre fue insuperable, conocer cualquier cosa que ahora es insignificante era en verdad sorprendente el simple hecho de ver un perro en la calle era como si vieras un animal salvaje andando por la acera.
• Tenías la atención de tus padres de una forma mas especial, en mi caso si tenía problemas con alguna tarea de la primaria me ayudaban ahora ellos se comportan indiferentes al presentarles similar inquietud. 

• Eras uno de los seres más curiosos que podría exisitir en el planeta, cualquier palabra, acción, objeto o conversación que no entendías la cuestionabas inmediatamente a tu padres, te podrían enviar de corresponsal de una televisora por ser tan preguntón y los fenómenos que ocurrían entorno a la naturaleza te provocaba las más interesantes dudas.
• La navidad sigue siendo una de las épocas de unidad y felicidad mas importante del año pero no hay comparación con los inviernos de la niñez, la esperanza que surgía al ver los regalos debajo del árbol navideño y las ansias que te provocaba el saber que hay adentro.
• Irrumpir con alguna regla de las que impusieron los padres o algún maestro del colegio ya sea de forma incidental o consiente podría provocarte conflictos en tu mente y un miedo al pensar que lo peor podría ocurrir.
• El miedo era sobrenatural en diferentes aspectos, la noche, escuchar un simple ruido, ver a alguien que no esperas, perderte en un centro comercial sin padres a la vista, ver un insecto extraño, etc.
• La preocupaciones eran mas simples y fácil de resolver que las que se presentan a estas edades, sin comparación a las que nos esperan en el futuro.
• Tu creatividad  podría hacer que unas piedras, hormigas o un simple cúmulo de tierra te mantuvieran la imaginación andando.

En resumen debemos de mantener diferentes aspectos que un niño siempre mantiene en su tiempo cotidiano  son la capacidad de asombro, humildad e imaginación y la manera en que pueden afrontar los problemas que puede ser imprescindible en nuestra vida, por esto olvida la nostalgia de esa época y aplica en tu vida lo que te gustaba del ser niño.

Saludos, Jorge Eduardo De León